¡California necesita agricultura sin riego!

Los residentes de California han estado notando algo desconcertante cuando llegan a la tienda de abarrotes este año: es un año terrible para las frutas con hueso. A pesar del hecho de que estamos en plena canícula, los melocotones, nectarinas, albaricoques, ciruelas, cerezas y similares son mucho más caros que usualmente, y encima son de mucha menor calidad. ¿Qué está pasando? La respuesta está en la sequía extrema del estado, lo que causó estragos en numerosos cultivos de este año, incluyendo la fruta con hueso. La agricultura del estado puede estar experimentando algunos cambios importantes que se verán reflejados el año que viene, gracias al cambio climático y los cambios naturales en los niveles de lluvia, y no es la única región con miras de un futuro más seco.

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Es por eso que algunos agricultores están recurriendo a la agricultura sin riego, la cual aborda el problema de frente. Esta agricultura utiliza la mínima humedad atrapada en la tierra para proporcionar a los cultivos con lo que necesitan, en lugar de regar y sorprendentemente, en realidad produce cosechas asombrosas, como tomates llenos de un sabor explosivo. Sin riego, las plantas no se cargan de agua, y el cultivo que se da como resultado es cualquier cosa menos seca: tiende a ser más pequeño, pero es sabroso, intenso y dulce, gracias a que crecen en los días calurosos bajo el sol de California.

La agricultura sin riego no es nada nueva, y no fue inventada en California. Fue ampliamente utilizada en todo el Mediterráneo durante siglos, ya que los agricultores de las regiones como Grecia, Italia y Marruecos no tenían un extenso suministro de agua para usarla en la agricultura. Se vieron obligados a utilizar prácticas que ayudarían a retener la humedad del suelo para los cultivos como las aceitunas, y se perfeccionaron las técnicas de agricultura sin riego para su clima. Las tácticas utilizadas en la agricultura sin riego incluyen tener especial cuidado de la tierra para ayudar a que permanezca fértil y retenga la humedad; el espaciamiento de los cultivos de manera apropiada para reducir la competencia por los limitados suministros de agua, y el cultivo de alimentos adaptados a las condiciones de baja humedad, incluyendo cultivos resistentes que envían sus raíces al fondo para acceder a suministros de agua bajo tierra.

El 80 por ciento del agua que se usa en California va a la agricultura, mientras que los residentes en un creciente número de ciudades viven con restricciones de agua y exhortos a reducir dicho consumo. California está empezando a ver que el área real donde se tiene que aplicar la frugalidad de los recursos se encuentra en el sector agrícola, ya que no tiene que usar tanta agua como lo hace. La agricultura sin riego podría ayudar al estado a reducir radicalmente el consumo de agua, lo cual reduce la presión sobre los recursos hídricos y a su vez mejora las condiciones para los estados (y países) vecinos que luchan por el suministro limitado de agua del Río Colorado.

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Imagen Granjero Examinando el Suelo vía Shutterstock